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La perfilación criminológica como técnica de prevención en empresas

Saludos lectores


Desde hace tiempo llevo ganas de desarrollar este tema debido a que la perfilación es un área que me apasiona, y qué mejor forma que hablar sobre ella y su aplicación dentro de las organizaciones, al tiempo que me permite eliminar el mito que existe sobre esta técnica y su uso exclusivo para la investigación en delitos como el homicidio o la violación. Antes de continuar, si no conoce muy bién sobre la perfilación, lo invito a leer mis artículos anteriores La Técnica del Perfil Criminal en Costa Rica La ciencia del comportamiento.


Comúnmente, esta técnica es conocida como perfil criminal, perfil del delincuente, o “profiling”. No obstante, he preferido quedarme con el término de “Perfil Criminológico” y en esto debo señalar la madurez que ha alcanzado esta expresión, debido a que anteriormente, también hice uso de estos otros sinónimos, pero una vez que nos adentramos en su estudio y vamos comprendiendo cómo ha evolucionado a través de la historia, podemos darle contexto dentro de la ciencia criminológica, y ya no como una técnica meramente psicológica. Como bien indica el criminólogo Vicente Garrido:

(…) la expresión de perfil criminológico proviene de la idea de que un buen perfil exige el conocimiento aplicado e integrado de las ciencias del crimen, esto es, de la Criminología. Y, por otra parte, muchas de las actividades del perfilador van más allá de sugerir la descripción del sospechoso de un crimen o una serie de crímenes, aunque sea ésta la tarea más relevante que suele acometer. (El perfil criminológico como técnica forense, 2007)

Ahora bien, ¿cómo puede servir la aplicación de esta técnica para prevenir pérdidas dentro de una organización? Como mencioné al inicio de esta entrada, se suele asumir que esta herramienta se aplica en casos complejos, como homicidios, secuestros, violaciones, terrorismo, naturalmente por el éxito de series televisivas y la publicación de libros, documentales e historias que suelen fascinar y cautivar público, sin embargo, en la obra de 1893 de Hans Gross “La investigación criminal: Un manual práctico para magistrados, policías y abogados” el autor escribió lo siguiente:

En casi cada caso el ladrón ha dejado el rastro más importante de su paso, es decir, la manera en la que él ha cometido el robo. En efecto, cada ladrón tiene su estilo característico o modus operandi, del cual rara vez se aparta, y que es completamente incapaz de abandonar por completo; a veces este rasgo distintivo es tan visible y llamativo que incluso el policía novato puede detectarlo sin dificultad; pero, por una parte, el novato no sabe cómo agrupar, diferenciar o utilizar eso que ha observado, y, por otra parte, el carácter particular del procedimiento mostrado por el delincuente en ocasiones no es tan fácil de reconocer.

En este manual, como indica Garrido en su artículo, Gross mencionó varios métodos ” (…) para perfilar la conducta de asesinos, incendiarios, ladrones, mujeres que testificaban una violación falsa, y otros tipos”. Y para eliminar de una vez por todas la falsa creencia sobre la aplicación de esta técnica, es necesario mencionar la obra de John O Connell y Harry Soderman “La investigación criminal moderna” donde se detallan diferentes tipos de perfil, incluyendo, el de los que roban con violencia o en tiendas.


Y es gracias a todo lo anterior que dentro de una empresa, de cualquier sector comercial, es posible aplicar el perfil criminológico para la detección de conductas sospechosas, labor que recaerá mayoritariamente, sobre oficiales o superiores (bajo una cultura preventiva, cualquier colaborador puede detectar señales básicas y alertar). Es importante que el personal de seguridad conozca sobre técnicas de perfilación y se les capacite para agudizar sus sentidos y prestar atención realmente a aquellas conductas que sí se ajustan al perfil de un delincuente y no se guíen únicamente por la apariencia física, error común en oficiales, que descuidan a las personas de buen vestir o apariencia, y se concentran solo en aquellos que visten según una etiqueta social (metaleros, pandilleros, personas tatuadas o con piercings, nacionalidad).


Por lo general, robos y hurtos son los más frecuentes en las empresas, pero dependiendo de la actividad a la que se dedique dicha organización, pueden surgir otras figuras delictivas, como acoso u hostigamiento laboral/sexual, estafas, fraudes, fuga de información, y como criminólogos hemos de aprovechar los beneficios de esta herramienta y darle un uso adecuado. En tiendas de tipo retail, la técnica puede ayudarnos a crear patrones de conducta similares que se hayan presentado en casos anteriores, de manera que los oficiales o encargados de seguridad, puedan detectar posibles señales de una persona con intención de robar. Acá podemos mencionar como ejemplo, el uso de ropas holgadas que facilitan ocultar mercadería, en el sector hotelero, se pueden crear patrones de conductas que levanten sospechas sobre actividades ilícitas que se estén realizando, como trata de personas, proxenetismo, tráfico de drogas y no puede faltar por supuesto, todos los delitos internos que se den y que también se pueden estudiar con la técnica.


A nivel de RRHH, sobre todo cuando se trata de contratar personal para cargos sensibles, como el caso de seguridad, altos directivos o puestos delicados (tesorería, contabilidad, informática), es importante que se realice un buen perfil criminológico, para evitar que ingresen personas que vayan a generar algún tipo de pérdida a la empresa. Así mismo, cuando se sospecha que se está cometiendo un hecho ilícito, o en su defecto, ya se cometió, se debe ir analizando con detalle cada indicio que se presente, cruzar información con respecto a la hora que fue o se presume se dio el hecho, y si ha pasado en más de una ocasión, si hay algún empleado que haya estado laborando en cada uno de los hechos, horas aproximadas, testigos.


Cada empresa puede definir cómo aplicar el perfil según las características del negocio y el tipo de delitos que está propensa a recibir, para esto se hace necesario como siempre, realizar un estudio de seguridad que muestre los verdaderos riesgos y a partir de ahí, capacitar al personal para implementar el uso de esta herramienta. Hay negocios que manejan padrones con la información de personas que han sido detenidas por algún ilícito, o por faltas que atentan contra las políticas internas que requieren aplicar un derecho de admisión. Esto se realiza en lugares que por lo general están abiertos al público, por lo que esta práctica se puede aprovechar y utilizar esta información tan valiosa, para levantar en cada caso descripciones de estas personas y hacer una recopilación de la misma que permita cruzar información y comparar el modus operandi de los delincuentes, contra género, tipo de delito cometido y demás.


La estadística que se genera con esto, es el sustento para inferir el comportamiento de posibles delincuentes que lleguen a un establecimiento a hurtar, por ejemplo, señales que pueden ser detectadas por el mismo personal de seguridad y adoptar medidas para estar atentos ante cualquier amenaza. Claro está, que esto solo es una parte de lo que implica el perfil criminológico, ya que existen dos corrientes en su método de aplicación, que son el inductivo (como en este caso) y el deductivo, que surge de los estudios del profesor David Canter, y que pretende restarle valor a esta metodología al enfocarse en el análisis directo de los indicios encontrados para contar la historia real del hecho y de ahí partir con el perfil, sin utilizar información previamente recolectada, no obstante, como ciencia integral, la criminología es tan flexible que permite absorber todo lo bueno de ambos enfoques, y darle su propio significado, incluso saber cuándo se puede aplicar uno, o cuando el otro.


Concluyo esperando que esta información sea de utilidad para todos los criminólogos que aún tienen dudas sobre la aplicación de esta ciencia en el mundo empresarial, nos han vendido tantas ideas equivocadas a lo largo de nuestra preparación académica, que nos limitamos a creer que la criminología es aplicar teorías en cada homicidio que sucede, yo espero que cada vez hayan menos egresados con esta mentalidad y que maduremos estas ideas en pro de nuestro crecimiento profesional.


Finalmente, les dejo de recomendación leer el artículo Como aplicar la Perfilación Criminal en empresas por el autor y colega de la página Criminología Dinámica, Jose Luis Prieto, donde encontrarán información adicional para ampliar conocimientos sobre este tema.

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